Hay noticias que se publican medio a escondidas - nunca en portada - o en casos excepcionales, si como en Lampedusa el pasado año, muere tanta gente; estas noticias se leen, la gente se estremece y al día siguiente se olvida, con un par o tres de ¡pobrecitos! enmedio. No creo que a estos casi 3.500 inmigrantes les preocupara demasiado el ébola o la malaria. Ahora ya no les preocupa nada, mientras aquí, los que están preocupados, son los del Gobierno de Madrid a los que sólo les preocupa expulsar cuantos más inmigrantes mejor y de cualquier manera, aunque sean en camiones de basura y mirar que no les salten por la valla de Melilla, no sea que molestasen a los que están jugando al golf. No les suben en aviones para devolverlos y los tiran desde arriba como hacían los militares Argentinos porque no se atreven, que ganas a más de uno no le faltan.
Y es que el Mediterráneo no es igual para todos. 3.419 personas han muerto intentando cruzarlo en lo que va de 2014, de 207.000. Es el mar donde más flujo migratorio se ha registrado, cerca del 60% de las 348.000 personas que se lanzaron a los mares y océanos del mundo con el objetivo de migrar o buscar asilo. Esta cifra la reveló el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) este miércoles y ha advertido de que la comunidad internacional está dejando de lado su objetivo de salvar vidas en medio de la confusión entre los países costeros respecto a cómo reaccionar .
Y es que en estos países costeros les importan un bledo los inmigrantes y sus vidas, a menos que sea un jeque àrabe que venga a Marbella con su séquito y el yate.
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